sábado, 20 de junio de 2020

GALLETAS, QUIÉN DIJO GALLETAS..???

Hay algo que todo perrin que se precie de tal, JAMÁS pasará por alto... aunque duerma, se aburra o vea tele.

Aunque se encuentre en el fondo de la casa o en la habitación más cerrada... El sutil crujido de un paquete de galletas.




Por supuesto, las galletas son tan estupendas que también sucede con otras especies. jeje





jueves, 18 de junio de 2020

GALLETAS DE AVENA, ZANAHORIA Y MIEL

Buscando en la red recetas de galletas fáciles de hacer, encontré estos 2 sitios de cocina que tienen muy buenos consejos para todo tipo de preparados comestibles.

Galletas de Avena Galletas de Avena

Después de tomar un poquito de cada receta... y sacando otro tanto de lo que decían, llegué al siguiente resultado:


INGREDIENTES:
– 40 gr de mantequilla aprox.
– ¼ Taza de azúcar granulada.
– 1 Cucharada de miel.
– 1 Huevo.
– 1 Taza de harina.
– 1 Taza de avena instantánea.
– 1 Cucharada de polvos de hornear.
– ½ Cucharadita de bicarbonato.
– Esencia de vainilla.
– 1 Zanahoria grande.
– 1 Yogur natural.
– Leche si es necesario.

Con estas cantidades me salieron 12 galletas en total, pero todo dependerá del tamaño que prefieras tus galletas. En mi bandeja de horno, cupieron 9 porciones de aprox. 6 cm de diámetro. Una vez cocidas las galletas crecieron a 10 cm.


PREPARACION:
1. Enmantequillar y enharinar una bandeja para horno.

2. Rallar la zanahoria, agregar 1 cucharada de miel, un pote de yogur natural de 150 gr y reservar.

3. En un bowl aparte, batir la mantequilla y el azúcar hasta que se vea cremosa. Se puede mezclar con batidora o con una cuchara... pero hay que tener mucha paciencia y una fuerza de brazo que te la encargo.

4. Agregar esencia de vainilla, bicarbonato, el huevo y seguir batiendo... debe quedar todo bien integrado. Una vez terminada esta etapa, dejas el brazo en el basurero y te compras uno nuevo, jeje!

5. A continuación, incorporar la harina cernida y seguir revolviendo con espátula o cuchara. Cuando el menjunje se vea seco, agregar la zanahoria mezclada con yogur y si aún continua seco... suficiente leche hasta que la consistencia cambie a cremosa.

6. Finalmente, la taza de avena y los polvos de hornear. La masa se verá algo extraña con las hojuelas de avena, colocar la mezcla en la heladera.

7. Pasados 30 minutos de frio, poner de a cucharadas en la bandeja. Formar la galleta con la espátula, que quede redondita... en lo posible. Espaciarlas porque crecen.

8. Cocinar a horno bajo por unos 20 minutos con llama ascendente (depende de tu horno). Cuando la galleta se vea inflada y algo dorada por debajo, cambiar a calor envolvente hasta que se dore por completo.

La consistencia de la galleta es blanda, esponjosa, de un sabor agradable... no muy dulce.

Galletas de Avena

De todas formas, te dejo los enlaces a las RECETAS ORIGINALES, por si no te convence mi experimento galletístico. 👇


– Directo al Paladar: Galletas de Avena y Zanahoria.

– Amy’s Healthy Baking: Carrot Cake Oatmeal Cookies.


Cosas que aprendí cocinando estas galletas.

– Enfriar la masa por unos 30 minutos antes de hornearla, le da consistencia al menjunje. Al parecer, la avena absorbe un poco de humedad, lo que ayuda que la cocción de la galleta quede inflada y no plana.

– No hay que ser impaciente, es mejor esperar un rato que la galleta se enfríe porque tibias son blandas y se rompen muy fácil. =|

– Tampoco seas perezoso como yo y te pongas a fabricar una súper mega galleta que abarque toda la bandeja del horno. En primer lugar, se demorará el doble en cocinarse... y dos, te darás un panzazo memorable. Es algo sicológico, al cerebro le da lo mismo comerse una galleta de 6 cm que una de 26. No pararás hasta que ya no quede nada del “mega galletón”. MegaGalletón

– Entre más avena agreguemos y menos harina tenga la mezcla, su consistencia es menos espesa, con más hojuelas a la vista y cuesta formar la galleta. Esto para mi gusto, le da una apariencia tosca. Es mejor que la medida de harina y avena, sean equivalentes... Es decir, 1 taza de harina y 1 taza de avena.

– Preferí saltarme la parte de las pasas y el glaseado, en cambio agregué un yogur natural que unido a la zanahoria le dio un excelente sabor.


sábado, 13 de junio de 2020

MIS ACORDES FAVORITOS

Tengo un vecino nuevo al que le gusta cantar. Cada mañana nos despierta con una entonación lírica en “SI Sostenido-Bemol” que hace paralizar hasta el corazón más duro.

Es tal su nivel de desafinación, que por un tiempo, me quito hasta las ganas de tocar guitarra, porque me daba la impresión que su ímpetu comenzaba, CADA VEZ que escuchaba rasgueos provenientes de alguna casa vecina.

Y como soy de aquellos aficionados que le gusta ensayar con toda la parafernalia de cables, efectos y amplificador... era más fácil colgar la guitarra que perder el sonido. =|

Porque eso es lo que me gusta de la música, que te obsequia un sentimiento. Una emoción que se retroalimenta cada vez que punteas una nota, y que al devolverse por el amplificador, te anima a seguir con otra, otra y otra...

Mis Arcordes Favoritos
Ilustración de Chiara Belmonte

Uno de mis grupos favoritos para ensayar acordes es Foo Fighters, yaaaaaa si abuchéenme!! Muchos dirán que es una banda copia de Nirvana, que Dave Grohl siempre quiso ser Kurt y bla, bla... pero nadie puede discutir que tiene la misma fórmula mágica para hacer unos temas estupendos, con melodías bellas que se te pegan a la oreja por días.

Sin mencionar, que logró su propio sello pese a toda la mierda que le echan... Yo lo defiendo, me encanta. Supo reinventarse y conseguir ser “frontman” de una banda que tiene muy buenos discos grabados.

Y precisamente, uno de esos discos poderosos es “In Your Honor”, que este 14 de Junio cumple 15 años desde que se editó por primera vez. Una joya presentada en 2 cds totalmente opuestos por el vértice. El primero, bien rockero muy al estilo Foo, el otro más íntimo y bellamente melódico.

De ese lado acústico tengo varias favoritas, estas son 2 de ellas:

Por supuesto, estos acordes como todos los que aparecen en este blog, son sacados desde mi oído y limitación musical... a ti te puede sonar totalmente diferente.


What If I Do?: Es un tema pegajoso de bonita melodía, tiene pocos acordes pero con ritmo constante y parejo que hace resaltar las cuerdas altas.


Ver Original en YouTube.

Para escuchar en la nube, pincha AQUÍ
Acordes y letra What If I Do?.


Miracle: Un poco más difícil que la anterior. En algunos puntos, especialmente en la parte final de los coros, los cambios son rítmicos con notas de a pares que le dan un compás muy bonito.


Ver Original en YouTube.

Para escuchar en la nube, pincha AQUÍ
Acordes y letra Miracle.


martes, 19 de mayo de 2020

Me pareció ver un lindo perrito...

No cabe duda que en la red podemos encontrar todo tipo de fotografías perrunas... Algunas son increíbles, otras divertidas y tiernas. Sin embargo, hay un tipo que sobresale no sólo por su belleza, si no porque parecen verdaderas pinturas. Mira aquí algunos ejemplos:


Alicja Zmysłowska (POL)
Instagram: @alicjazmyslowska
Facebook: Alicja Zmysłowska Photography

Lindos Perritos


Gabi Stickler (DEU)
Instagram: @mali_thegolden
Facebook: Mali, the Golden by Gabi Stickler

Lindos Perritos


Kristýna Kvapilová (CZE)
Instagram: @kristynakvapilovaphotography
Facebook: Kristýna Kvapilová-Photography

Lindos Perritos


Kasia Heinrich (POL)
Instagram: @kasia_heinrich_photography
Facebook: Kasia Heinrich kahora777 Photography

Lindos Perritos


martes, 12 de mayo de 2020

Cavilaciones de Confinamiento...

Si hace dos meses atrás, alguien me hubiera dicho que a estas alturas llevaríamos más de 30 mil infectados en Chile por coronavirus, habría pensado que estaba dando la hora. Según yo, en estos momentos estaríamos dando vuelta la hoja, con la mitad de los casos y el virus en el bolsillo. Pero no, acá me encuentro haciendo un análisis de toda esta historia y viendo que no sólo no ha terminado, sino que recién comienza a subir la escalera.

Por fortuna, pertenezco a ese grupo de especímenes creativos que no les molesta estar solos y confinados... Mientras la economía lo permita, siempre se puede escribir, coser, dibujar, tejer, aprender alguna nueva técnica o habilidad de lo que sea... o, deformar fotos con aplicaciones extraordinarias, entrometerme en la cocina, tocar algún instrumento, hacer deporte, leer...

Pero como a todos, también mi mente exige dejar de ver las mismas paredes y sentarme en algún parque aunque sea por un momento. La “Eleanor Oliphant” que habita en mi interior no busca tanto relaciones interpersonales, más bien estar alrededor de gente que comparte un objetivo común, como pasear un perro o comer un helado.


Cavilaciones de Confinamiento
Ilustración de Jean Jullien


En el parque, los perros son amos y señores del lugar. Sus humanos como siempre preocupados, regañándolos por chapotear en una poza o masticar algo indescifrable, suelen juntarse en grupo a conversar de sus "perro-hijos" y compartir todo tipo de tips de entrenamiento, medicinas y artilugios novedosos que los mismos cachupines se encargan de repartir entre ellos.

Mientras los canes corretean felices y se persiguen como si se les fuera la vida, todo transcurre en perfecta armonía, hasta que uno mucho más consentido, se cansa y decide poner orden con una dentellada. Ahí termina la cosa, todos para la casa.

Siempre me ha gustado sentarme en el pasto a mirar sus carreras y chistes. Nunca falta el can personaje que sobresale del resto, haciendo una que otra travesura... o molestando a su humano con alguna fechoría, que siempre suele ser divertida sólo para los que miramos.


Recuerdo un Bulldog Francés llamado Rocco, le encantaba embestir a todo aquel que estuviera sentado en el suelo. Te miraba de lejos y cuando hacía contacto visual, él simplemente estiraba una sonrisa y apuntaba, derecho contra tu humanidad.

Era tan fuerte el enviste que siempre terminaba tumbada con él sobre mi espalda y su cara llena de satisfacción como quien sube el Everest. Luego, volvía a correr a su punto de vigilancia y a repetir la acción... No paraba hasta que su humana llegaba a retirarlo desasiéndose en disculpas, pero uno lo aceptaba. Rocco era así, un adorable bravucón que me veía como un pin de bolos.

Pero independiente de esta historia, no dejo de pensar que pasará más adelante, cuando volvamos a nuestras rutinas y vicios... Cómo haremos para confiar de nuevo en el otro, sin verlo como una amenaza?? El día que podamos ir a un parque otra vez y sentarnos en una plaza, habrá un Rocco lanzándome lejos o humanos compartiendo aficiones comunes??

Este último tiempo todo ha sido tan repentino. Algo que parecía lejano, que le ocurría a otros... a millones de kilómetros de distancia. En cosa de semanas está aquí... acechando, atemorizando y haciéndonos sentir diminutos.

Porque dejando de lado todo tipo de teorías conspirativas, esto me hace reflexionar sobre mi propia humanidad. Me invita a ser humilde, disciplinado y obediente porque sin esas cualidades, simplemente terminamos enfermos o muertos.

La gran gracia de los virus es que no discriminan. Nos muestra nuestra insignificancia desde lo más profundo de sus orígenes. Tan sólo un montón de primates sin pelo, viviendo en una casa prestada a la que le hinchamos las pelotas cada día, sin descanso. Tarde o temprano tenía que cabrearse, o no?


sábado, 2 de mayo de 2020

INVENTO DE QUEQUE

Invento de Queque

Soy de aquellas personas que se entusiasma fácil. Cualquier proyecto o actividad me parece divertida, una oportunidad... pero ese mismo entusiasmo, hace que a veces caiga en errores o me precipite sobre una cometa, con más expectativas que conocimientos.

Envalentonada como estaba por el resultado anterior, me volqué a la tarea de hacer una especie de queque mutante con manzana, canela, pasas y dulce de membrillo.

Luego de varios intentos fallidos y un par de aciertos, llegué a una conclusión abismante: Una tarta no es lo mismo que un queque.

La tarta tiene su encanto... Es humilde, se esconde detrás de esos pedacitos de fruta y se adapta a tus necesidades. El queque no, se cree el cuento el muy desgraciado... Tiene que inflarse para verse bonito y deseable.

Al queque le gustan las reglas y si te sales un poco o te entra el lado creativo, te lo hace saber... atormentando con su frialdad deslavada o sorprendiendo a último minuto con una mortal reverencia.

Todo puede suceder cuando te pones de inventor en la cocina. Por lo demás, si te animas a desarrollar esta receta, aquí te dejo mi experiencia y las conclusiones a las que llegué.

Invento de Queque


INGREDIENTES:
– 2 Tazas de harina.
– 60 gr de mantequilla.
– 1 Cucharada colmada de polvos de hornear.
– ½ Cucharadita de sal.
– 1 Huevo.
– 1 Manzana.
– Jugo de 1 limón.
– 1 Pizca de canela molida.
– 100 gr de pasas.
– Dulce de membrillo. (Aprox. 100 gr)
– Ralladura de cáscara de limón.
– 1 Cucharada grande de miel para la masa y otra para la manzana.
– Leche si es necesario.


PREPARACIÓN:
1. Enmantequillar y enharinar un molde. Para esta preparación utilicé uno de vidrio de 20 cm de diámetro.

2. Rallar la manzana, agregar el jugo de limón, miel, canela y reservar.

3. Mezclar la harina previamente cernida con la mantequilla hasta conseguir migas como arena. Frotar con los dedos, que quede bien integrada.

4. Agregar los polvos de hornear, un poco de sal, el huevo y ralladura de limón, seguir mezclando con una cuchara.

5. A continuación, añadir la miel con la manzana rallada, el jugo de limón y las pasas enharinadas, eso impide que se vayan al fondo. Si aún la mezcla se ve seca, agregar unos chorritos de leche hasta que la masa tenga una consistencia húmeda, como una pasta.

6. Traspasar este menjunje al molde y esparcir bien. Encima colocar rodajas de dulce de membrillo, también puede molerse con un tenedor y colocar por sectores de a cucharada. El peso hará que el dulce se hunda en la masa integrándolo mejor. Personalmente me gustó más esta última manera, además que se puede ser grosero con el dulce de membrillo y no se nota tanto, jeje!

Otra alternativa que me resultó bastante bien, fue reemplazar las pasas por cubitos de dulce de membrillo. Agregarlos a la masa justo antes de vaciar al molde... Así, cuando el queque esté horneado, los trocitos de dulce aparecen de sorpresa. Es importante dejar que se enfríe antes de probar porque el dulce de membrillo quema como el infierno. Shy


ANÁLISIS DEL HORNO:
Una de las etapas más difíciles con las que me topé, fue entenderme con el horno, aprender sus tiempos y descubrir cuanto quema el condenado.

Para esta preparación, utilicé un horno eléctrico, a 175° durante 40 minutos, con calor sólo abajo. Luego, agregué llama a ambos lados por 20 minutos más. En esta etapa vuelve a subir otro poco... Sin embargo, aún puede quedar la embarrada.

Si el interior del queque no está suficientemente cocido, aunque por fuera se vea maravilloso. Una vez frío, todo lo que subió... se desvanecerá.

Creo que las veces que esta parte no me resultó, fue precisamente por impaciente o por darle demasiado calor, muy rápido.

En resumen, si se cocina de a poco a la bestia, hay mayores posibilidades de salir airoso del desafío. También es bueno comprobar antes de apagar, introduciendo un palillo de madera en su interior que debe salir seco.

martes, 21 de abril de 2020

EXPERIMENTO REPOSTERIL

Si hay algo para lo que confieso ser bastante incompetente, es en la cocina. Algo de empeño le he hecho en algún momento de mi vida pero a decir verdad, con lamentables resultados.

Por fortuna, la modernidad ha permitido que me mantenga a flote, sin tener que recurrir a elaboradas preparaciones llenas de etapas infinitas, que una vez terminadas y presentadas con orgullo, son recibidas por mis victimas generalmente con escasas muestras de afecto.

Hoy, debido al confinamiento y a esa imperiosa necesidad por comer algo dulce, volvió a aflorar ese instinto culinario tan escondido en mi interior. El plan, hacer una tartaleta dulce con elementos que tuviera en casa.

Como buena principiante, antes de introducirme en la labor, leí muchas recetas... pero eso me dejó más confundida que aliviada.

Unos dicen que mezcle la mantequilla y el azúcar para hacer la masa, otros que bata muuuuchas claras, demasiadas... o que sólo utilice yemas, poco menos que oreadas al sereno por 40 noches y de gallinas con pluma blanca en sus alas.

Mientras que algunos usan varias harinas... Integral, de avena, de almendras, con polvos de hornear... o masa madre, Uuuffff!! Tanto término técnico, tantos ingredientes, tantos métodos distintos.

Al final, seguí mi olfato y terminé con un revoltijo de recetas, que si bien hicieron que la preparación quedara bastante comestible, siempre se puede mejorar. Cada uno tiene sus propios gustos y maneras en la cocina que más le acomodan.

Yo por lo menos, doy por superado este desafío y dejo aquí registrado el procedimiento por si mi yo del futuro se anima en algún momento a realizar esta proeza gastronómica otra vez.

Experimento Reposteril


INGREDIENTES PARA LA MASA:
– 2 ½ Tazas de Harina.
– 100 gr de mantequilla.
– 1 Cucharada de polvos de hornear.
– ½ Cucharadita de sal.
– ¼ Taza de azúcar o miel.
– 2 Huevos.
– Leche si es necesario.
– Ralladura de cáscara de limón.

INGREDIENTES PARA RELLENO:
– 3 Manzanas medianas.
– Jugo de 1 limón.
– 1 Cucharada de azúcar o miel.
– 1 Sobre de mermelada.


PREPARACION:
1. Enmantequillar y enharinar un molde para tarta de aprox. 26 cm de diámetro.

2. En un bowl mezclar las 2 ½ tazas de harina, previamente cernida, con la mantequilla... Si es mantequilla en trozo (no blanda) es mejor entibiarla y una vez líquida juntarla con la harina, esto hace que sea más fácil unir los ingredientes.

3. Frotar con los dedos hasta conseguir migas como arena, agregar los polvos de hornear, un poco de sal para acentuar los sabores y azúcar a gusto, yo agregué ¼ de taza solamente... puede ser miel. La idea es que la masa no quede tan dulce y el relleno sea el protagonista, pero eso es cosa de gustos.

4. A continuación, agregar los huevos de a uno y mezclar con una cuchara. Si la masa se ve seca, añadir leche hasta que la consistencia sea la de un chicle y por último la ralladura de limón. Esparcir bien sobre el molde de tarta hasta las orillas.

5. Cocinar a fuego bajo por 10 minutos aproximadamente, esto dependerá del tipo de horno. Yo utilice uno eléctrico a 175°. La masa no se tiene que cocinar, si sube mucho pinchar con un tenedor.

6. Aparte pelar las manzanas, cortar en rodajas, endulzar con miel o azúcar y agregar el jugo de limón para que la manzana no se oxide, reservar.

7. Una vez fría la masa, colocar las rodajas de manzanas bien distribuidas y esparcir encima el jugo de limón. A continuación, agregar todo el sobre de mermelada para que las rodajas de manzana no se resequen en el horno. Debe quedar toda cubierta con una capa de dulce, esto es importante.

8. Cocinar aproximadamente a 200° durante 45 minutos o hasta que la masa se vea cocida y la mermelada caramelizada.


lunes, 13 de abril de 2020

Cuando el VoleiDog es toda una aventura…

El deportista Mathias Berntsen y su asombrosa perrita Kiara nos muestran que entrenar también puede ser muy divertido.


Kiara, es la protagonista de este video y su talento para jugar al Volleyball es realmente increíble...

Mira como espera paciente su turno y sin perder de vista la pelota, sincroniza todos sus movimientos para dar el pase preciso a su compañero de juegos y humano favorito. Simplemente genial!!! ♥

Si quieres saber más de las aventuras de esta perrita deportista, síguela en su cuenta de Instagram.


martes, 31 de marzo de 2020

Vivir en tiempos de cuarentena: Día de Provisiones

Son las 7 de la mañana y hoy toca salir en busca de alimentos. El comercio abre a las 8 pero hay que preparar la mente con antelación.

Por alguna extraña razón, el cuerpo se resiste a hacer lo que tiene que hacer y cómo en una carrera con obstáculos, es necesario precalentar... Buscar esa energía interna que significa enfrentar a un enemigo invisible llamado pandemia, que en la calle puede tener miles de rostros distintos.

Todos somos potenciales portadores de un virus al que le tememos en extremo. No sólo porque nos podemos contagiar y no contarla, sino porque tememos ser culpables de enfermar a nuestro entorno y de algún modo hacerles daño.

Personalmente mi rutina para salir a la calle, ha cambiado bastante desde que comenzó este periodo de cuarentena. Ya no escojo los colores de ropa que combinen, más bien me visto para la batalla. Ropa que en otras condiciones estaría en el trapero, ahora cumple la función de ser liviana y sobre todo fácil de lavar.

Nada de anillos, aros o arreglos en la cara... Así tal cual, salgo a asustar al mundo con mi carro de compras, lista para el sacrificio.

En la calle, todos nos miramos con recelo, cualquier rasgo de gripe imaginaria o no, es sinónimo de alarma.

Para qué decir si alguien toce cerca... PELIGROO!! Zona Roja. Dejas de respirar y pasas corriendo, aguantando hasta ponerte morada si es necesario... pero diantres!! Verdad que el bicho puede entrar también por la mucosa del ojo. Entonces, como lo hago..?? Cierro los ojos y corro aguantando la respiración hasta que choque con algo??

Día de Provisiones

Sin mencionar que además del miedo de que alguien te estornude en la cara, está la posibilidad que TU lo hagas y los que estén cerca, quieran prenderte fuego... Todo puede ser en estos tiempos de incertidumbre y miedos paranoicos.

A nuestro alrededor todo ha cambiado, las calles lucen desiertas. La gente circula con mascarillas de todo tipo, formas y colores. Algunas llevan filtros, los más osados usan telas coloridas y dibujos estampados.

A diferencia de los días anteriores, hoy tomé la decisión de salir sin cubrir mi rostro... y así, valiente y desnuda enfrento mi cometido familiar. Porque he descubierto que aunque la mascarilla da cierta sensación de seguridad, también hace que me lleve más seguido las manos a la cara... ya sea para ajustarla porque molesta o para intentar comunicarme, que a decir verdad es como hablar amordazado.

Llegando a casa, comienza la otra parte de esta faena. Dejar los zapatos afuera, sacarse la ropa intentando no tocar nada y así, haciendo equilibrio corres a bañarte, limpiando interruptores, manillas, llaves y todo lo que esté a tu paso, metes la ropa a la lavadora y desinfectas lo que traes del exterior.

Finalmente, echas aerosol, alcohol, o cualquier cosa que deje una nube con diminutas partículas protectoras que como un conjuro mágico, mantienen protegido ese cordón sanitario llamado entrada.

Ahí quedan amontonados zapatos, bolsas de compras y carros, hasta la siguiente vez, que deba cumplir con este ritual que por lo menos acá, recién comenza.


Perrito divertido