Buscando en la red recetas de galletas fáciles de hacer, encontré estos 2 sitios de cocina que tienen muy buenos consejos para todo tipo de preparados comestibles.
Después de tomar un poquito de cada receta... y sacando otro tanto de lo que decían, llegué al siguiente resultado:
INGREDIENTES:
– 40 gr de mantequilla aprox.
– ¼ Taza de azúcar granulada.
– 1 Cucharada de miel.
– 1 Huevo.
– 1 Taza de harina.
– 1 Taza de avena instantánea.
– 1 Cucharada de polvos de hornear.
– ½ Cucharadita de bicarbonato.
– Esencia de vainilla.
– 1 Zanahoria grande.
– 1 Yogur natural.
– Leche si es necesario.
Con estas cantidades me salieron 12 galletas en total, pero todo dependerá del tamaño que prefieras tus galletas. En mi bandeja de horno, cupieron 9 porciones de aprox. 6 cm de diámetro. Una vez cocidas las galletas crecieron a 10 cm.
PREPARACION:
1. Enmantequillar y enharinar una bandeja para horno.
2. Rallar la zanahoria, agregar 1 cucharada de miel, un pote de yogur natural de 150 gr y reservar.
3. En un bowl aparte, batir la mantequilla y el azúcar hasta que se vea cremosa. Se puede mezclar con batidora o con una cuchara... pero hay que tener mucha paciencia y una fuerza de brazo que te la encargo.
4. Agregar esencia de vainilla, bicarbonato, el huevo y seguir batiendo... debe quedar todo bien integrado. Una vez terminada esta etapa, dejas el brazo en el basurero y te compras uno nuevo, jeje!
5. A continuación, incorporar la harina cernida y seguir revolviendo con espátula o cuchara. Cuando el menjunje se vea seco, agregar la zanahoria mezclada con yogur y si aún continua seco... suficiente leche hasta que la consistencia cambie a cremosa.
6. Finalmente, la taza de avena y los polvos de hornear. La masa se verá algo extraña con las hojuelas de avena, colocar la mezcla en la heladera.
7. Pasados 30 minutos de frio, poner de a cucharadas en la bandeja. Formar la galleta con la espátula, que quede redondita... en lo posible. Espaciarlas porque crecen.
8. Cocinar a horno bajo por unos 20 minutos con llama ascendente (depende de tu horno). Cuando la galleta se vea inflada y algo dorada por debajo, cambiar a calor envolvente hasta que se dore por completo.
La consistencia de la galleta es blanda, esponjosa, de un sabor agradable... no muy dulce.
De todas formas, te dejo los enlaces a las
RECETAS ORIGINALES, por si no te convence mi experimento galletístico. 👇
– Directo al Paladar:
Galletas de Avena y Zanahoria.
– Amy’s Healthy Baking:
Carrot Cake Oatmeal Cookies.
Cosas que aprendí cocinando estas galletas.
– Enfriar la masa por unos 30 minutos antes de hornearla, le da consistencia al menjunje. Al parecer, la avena absorbe un poco de humedad, lo que ayuda que la cocción de la galleta quede inflada y no plana.
– No hay que ser impaciente, es mejor esperar un rato que la galleta se enfríe porque tibias son blandas y se rompen muy fácil. =|
– Tampoco seas perezoso como yo y te pongas a fabricar una súper mega galleta que abarque toda la bandeja del horno. En primer lugar, se demorará el doble en cocinarse... y dos, te darás un panzazo memorable. Es algo sicológico, al cerebro le da lo mismo comerse una galleta de 6 cm que una de 26. No pararás hasta que ya no quede nada del “mega galletón”.
– Entre más avena agreguemos y menos harina tenga la mezcla, su consistencia es menos espesa, con más hojuelas a la vista y cuesta formar la galleta. Esto para mi gusto, le da una apariencia tosca. Es mejor que la medida de harina y avena, sean equivalentes... Es decir, 1 taza de harina y 1 taza de avena.
– Preferí saltarme la parte de las pasas y el glaseado, en cambio agregué un yogur natural que unido a la zanahoria le dio un excelente sabor.